domingo, 24 de abril de 2011

ORACION A BEATO MARTIN MARTINEZ PASCUAL



ORACION PARA OBTENER GRACIAS
Padre de bondad,
que con la sangre de tus sacerdotes
Pedro Ruiz de los Paños y compañeros,
fecundaste su labor apostólica,
orientada de manera especial a la formación sacerdotal,
concédenos, por su intercesión,
abundantes vocaciones para dispensar tus misterios,
fidelidad en el servicio de tu Reino,
y la gracia que te pedimos por su intercesión.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

BEATO MARTIN MARTINEZ PASCUAL ... SACERDOTE QUE NOS ENSEÑA A NO TEMER A LA MUERTE Y DAR LA VIDA POR CRISTO

sábado, 16 de abril de 2011

EL PURGATORIO ES BIBLICO




LA EUTANASIA UN ASESINATO LEGAL



NO A LA EUTANASIA

La eutanasia es un acto deliberado de dar fin a la vida de una persona. «Anticipar la muerte, por muy cierta que sea, y por insoportable que parezca la vida, es otorgarse un derecho que sólo a Dios pertenece. Y esto aun cuando el enfermo consienta y lo solicite vivamente, porque ni siquiera él puede conferir un derecho que tampoco posee, ya que no es dueño ni propietario de su cuerpo y de su existencia».
La eutanasia se quiere enmascarar con la etiqueta de «muerte digna», lo mismo que el aborto asesino se quiere disimular llamándole «interrupción del embarazo».
Después del aborto vendrá la eutanasia. Por la misma razón que se permite matar a los niños no deseados, se permitirá matar a los enfermos y ancianos que estorben. «Que nadie se engañe. Primero fue el no nacido, ahora el anciano, y luego vendrá todo aquel que estorbe al que manda, o el que se atreva a disentir. La cultura de la muerte es imparable, aunque sus argumentos sean nulos», ha dicho Santiago Martín.
Se empieza con una etiqueta de buena apariencia: muerte digna, ayudar a morir al que no desea sufrir más. Pero luego se pasa a acciones aterradoras, como el caso de un matrimonio joven que quería eliminar a la abuela porque necesitaba su cama. Por los años 70, en la China comunista desaparecieron de golpe leprosos, ciegos, locos y minusválidos. Esta «purga» explica en parte el impresionante agujero descubierto por los demógrafos de cincuenta millones de habitantes en la población china..
Por la misma razón por la cual algunos defienden hoy el aborto, el día de mañana serán ellos mismos eliminados por sus hijos, que los considerarán una carga inútil. Diego Díaz en su libro «La última edad», recuerda unas palabras del demógrafo americano Dr. Gallop, de la Universidad de Manitoba (Canadá): «Una vez que hayas permitido la muerte del feto, el ciclo no se cerrará. No habrá límites de edad. Se habrá puesto en movimiento una reacción en cadena que podrá hacer de ti una víctima. Tus hijos querrán matarte, porque permitiste que fueran muertos sus hermanos y hermanas. Querrán matarte por no poder soportar tu vejez». Incluso hay quien se ufana de haber podido comprar un coche con el dinero del seguro de vida del enfermo que dejó morir por falta de asistencia . Y como dice el Dr. Gallop :«Si un doctor acepta dinero para matar a un inocente en el seno materno, el mismo doctor te matará a ti con un inyección, cuando alguien se lo pague».
El jueves 4 de junio de 1987 pudimos ver en televisión española en el espacio «Debate» cómo el defensor de la eutanasia decía que todos debíamos tener derecho a morir de modo digno, y el médico del Hospital de Basurto le dijo que en eso tiene toda la razón, pero la eutanasia consiste en matar al enfermo, y los médicos están para sanar, no para matar.
Morir dignamente es asumir la muerte humana y cristianamente.
Todos los periódicos de España hablaron del caso de la niña Mercedes Rodríguez, de Bilbao, cuyo padre, Emilio, de veintiséis años, pidió por todos los Medios de Comunicación que los médicos mataran a su hija enferma. Hubo algún matrimonio que quiso hacerse cargo de su hija.
Más tarde se encontró remedio a algunos de los males de la niña .
Una enfermera del Hospital holandés de Vliethoven asesinó por medio de una inyección a nueve ancianos .
Cuatro enfermeras de Austria fueron condenadas por liquidar a cuarenta y nueve enfermos que les resultaban molestos . Una de las enfermeras, llamada Waltraud Wagner, reconoce haber matado a once personas .
En Holanda se registran al año más de dos mil casos de eutanasia, mil de los cuales se practicaron sin ser solicitada por el paciente . La legalización de la eutanasia en 1992 ha provocado una enorme difusión de una tarjeta donde se dice que el portador no admite le sea practicada la eutanasia; y ochenta de cada cien mayores de setenta y cinco años no quieren ni oír hablar del Hospital por miedo a ser eliminados. El miedo a que se les practique la eutanasia ha hecho que los ancianos holandeses se asocien en la NPV para defenderse de la eutanasia. La NPV cuenta con sesenta y tres mil miembros, y en las últimas semanas se han apuntado cinco mil nuevos socios .
Conozco casos de enfermos terminales por los que se ha hecho todo lo que es razonable hacer, y que mueren desesperados creyendo que se les tiene abandonados. Si esto ocurre en una situación en la que la eutanasia está rechazada, cuántos morirían desesperados creyéndose abandonados en una situación en que la eutanasia esté legalizada?.
De hecho en Australia se ha anulado la ley que permitía la eutanasia .
No es lícito dar a un enfermo una inyección con el propósito de provocar la muerte, ya inevitable, apoyados en el piadoso deseo de que no sufra. No es lícito provocar directamente la muerte por un medio artificial, ni siquiera a petición del interesado, pero el médico puede dar al enfermo algún lenitivo de los dolores, aun a sabiendas de que posiblemente con ello se acelere indirectamente la muerte.
Pero si la dosis empleada, aunque no produzca directamente la muerte, hace privar al enfermo del uso de la razón hasta el momento de morir no se podrá aplicar al moribundo; a no ser que esté ya preparado espiritualmente. En caso contrario sería privarle de una adecuada preparación para su salvación eterna, lo cual es mucho más importante que el alivio corporal .
Todos debemos poner los medios proporcionados para conservar o recuperar la salud. Pero no estamos obligados a los medios desproporcionados como serían medicamentos muy caros o intervenciones quirúrgicas muy dolorosas . Cuando el enfermo, a juicio del médico, no tiene esperanza de curación, no es necesario prolongar indefinidamente (distanasia), por medio de medicinas o aparatos, una vida que corre irrevocablemente a su término . Sobre todo cuando la vida se prolonga artificialmente, tan sólo vegetativamente, sin reacciones humanas, es perfectamente lícito interrumpir las medidas extraordinarias y suspenderle el tratamiento o desconectarle los aparatos dejando que la naturaleza siga su curso . Una existencia irreversiblemente vegetativa, que ha dejado de ser humana, puede no tener sentido el prolongarla. Aunque no se puede privar a los familiares de su derecho de emplear todos los medios a su alcance para mantener la esperanza hasta última hora.
En septiembre de 1989 la Conferencia Episcopal Española ha redactado un «Testamento Vital» para los enfermos que se hallan en una situación terminal. Dice así: «El que suscribe pide que si por mi enfermedad llegara a estar en situación crítica e irrecuperable, no se me mantenga en vida por medio de tratamientos desproporcionados o extraordinarios, que no se me aplique la eutanasia activa, ni se me prolongue abusiva e irracionalmente mi proceso de muerte; pero que se me administren los tratamientos adecuados para paliar los sufrimientos.
Pido igual ayuda para asumir cristiana y humanamente mi propia muerte.
Deseo poder prepararme para este acontecimiento final de mi existencia en paz, con la compañía de mis seres queridos y el consuelo de mi fe cristiana».

La doctrina de la Iglesia sobre la eutanasia puede resumirse en este decálogo:

1º.- Jamás es lícito matar a un paciente, ni siquiera para no verle sufrir o no hacerle sufrir, aunque él lo pidiera expresamente. Ni el paciente, ni los médicos, ni el personal sanitario, ni los familiares tienen la facultad de decidir o provocar la muerte de una persona.
2º.- No es lícita la acción que por su naturaleza provoca directa o intencionalmente la muerte de un paciente.
3º.- No es lícito omitir una prestación debida normalmente a un paciente, sin la cual va irremisiblemente a la muerte: por ejemplo, los cuidados vitales (alimentación por tubo y remedios terapéuticos normales) debidos a todo paciente, aunque sufra un mal incurable o esté en fase terminal o en coma irreversible.
4º.- No es lícito rehusar o renunciar a cuidados y tratamientos posibles y disponibles cuando se sabe que resultan eficaces, aunque sea sólo parcialmente. En concreto, no se ha de omitir el tratamiento a enfermos en coma si existe alguna posibilidad de recuperación; aunque se puede interrumpir cuando se haya constatado su total ineficacia. En todo caso, siempre se han de mantener las medidas de sostenimiento.
5º.- No existe la obligación de someter al paciente terminal a nuevas operaciones quirúrgicas cuando no se tiene la fundada esperanza de hacerle más llevadera su vida.
6º.- Es lícito suministrar narcóticos y analgésicos que alivien el dolor, aunque atenúen la consciencia y provoquen de modo secundario un acortamiento de la vida del paciente. Siempre que el fin de la acción sea calmar el dolor, y no provocar subrepticiamente un acortamiento sustancial de la vida; en este caso, la moralidad de la acción depende de la intención con que se haga, y de que exista una debida proporción entre lo que se logra (la disminución del dolor) y el efecto negativo para la salud.
7º.- Es lícito dejar de aplicar tratamientos desproporcionados a un paciente en coma irreversible cuando haya perdido toda actividad cerebral. Pero no lo es cuando el cerebro del paciente conserva ciertas funciones vitales, si esta omisión provocase la muerte inmediata.
8º.- Las personas minusválidas o con malformaciones tienen los mismos derechos que las demás personas, concretamente, en lo que se refiere a recepción de tratamiento terapéutico. En las fases prenatal y posnatal se les han de proporcionar las mismas curas que a los fetos y niños sin ninguna minusvalía.
9º.- El Estado no puede atribuirse el derecho de legalizar la eutanasia, pues la vida del inocente es un bien que supera el poder de disposición, tanto del individuo como del Estado.
10º.- La eutanasia es un crimen contra la vida humana y contra la ley divina, del que se hacen responsables todos los que intervienen en la decisión y ejecución del acto homicida .
Autor del texto: Padre Jorge Loring

 

viernes, 8 de abril de 2011

ORACION DE JUAN PABLO II EN EL AÑO 2000 POR LA JUVENTUD




“es a Jesús a quien buscáis  cuando soñáis la felicidad;
Es Él quien os espera cuando no os satisface nada de lo que encontráis;
Es Él la belleza que tanto os atrae;
Es Él que os provoca con esa sed de radicalidad que no os permite dejaros
Llevar del conformismo;
Es Él quien os empuja a dejar las máscaras que falsean la vida;
Es Él quien lee en el corazón las decisiones más auténticas que otros querrían sofocar.
Es Jesús el que suscita en vosotros el deseo de hacer de vuestra vida algo grande, la voluntad de seguir un ideal, el rechazo a dejaros atrapar por la mediocridad, la valentía de comprometeros con humildad y perseverancia para mejoraros a vosotros mismos y a la sociedad, haciéndola más humana y fraterna.

CARTA DE DOCTOR NATHANSON SOBRE EL ABORTO

Soy responsable directo de 75.000 abortos, lo que empuja a dirigirme a el público poseyendo credibilidad sobre la materia.

Fui uno de los fundadores de la Asociación Nacional para Revocar las Leyes sobre el Aborto en E.E. U.U., en 1968. Entonces una encuesta veraz hubiera establecido el hecho de que la mayoría de los norteamericanos estaban en contra de leyes permisivas sobre el aborto. No obstante, a los 5 años habíamos conseguido del Tribunal Supremo que legalizara el Aborto en 1973.

¿Como lo conseguimos? Es importante conocer las tácticas que utilizamos, pues con pequeñas diferencias se repitieron con éxito en el mundo Occidental.

Nuestro primer gran logro fue hacernos con los mass-media; les convencimos de que la causa proaborto favorecía a un avanzado liberalismo y sabiendo que en encuestas veraces seríamos derrotados, amañamos los resultados de supuestas encuestas y los publicamos en los media; según ellas el 60% de los norteamericanos era favorable a la implantación de leyes permisivas del Aborto. Fue la táctica de exaltar la propia mentira y conseguimos un apoyo suficiente amañando el número de abortos ilegales que se producían anualmente en E.E. U.U.. Esta cifra era de 100.000 aproximadamente, pero la que reiteradamente dimos a los "media" fue de 1.000.000. Y una mentira lo suficientemente reiterada la hace verdad el público.

Y el número de mujeres que morían anualmente por abortos ilegales oscilaba entre 200 y 250... pero la cifra que continuamente repetían los media" era 10.000... y a pesar de su falsedad fue admitida por muchos norteamericanas convenciéndoles de la necesidad de cambiar las Leyes sobre el aborto.

Otro mito que extendimos entre el público es que el cambio de las Leyes solamente implicaría que los abortos que se practicaban ilegalmente, pasarían a ser legales. Pero la verdad es que actualmente, el aborto es el principal medio para controlar la natalidad en EEUU. Y el número de anual de abortos se ha incrementado en un 1.500% —15 veces más—.

La segunda táctica fundamental fue jugar la carta del anticatolicismo.

Vilipendiamos sistemáticamente a la Iglesia Católica, calificando sus ideas sociales de retrógradas; y atribuimos a sus Jerarquías el papel del "malvado" principal entre los opositores al Aborto Permisivo.

Resaltándolo incesantemente. Los "medias" reiteraban que la oposición al aborto procedía de dichas Jerarquías, no de los católicos; y una vez más, falsas encuestas "probaban" reiteradamente que la mayoría de los católicos deseaban la reforma de las leyes antiaborto. Y los tambores de los "media" persuadieron al pueblo americano de que cualquier oposición al aborto tenía su origen en la Jerarquía Católica y que los católicos probaortistas eran los inteligentes y progresistas. El hecho de que grupos cristianos no católicos, y aún ateos, se declarasen Pro Vida, fue constantemente silenciado.

La tercera táctica fundamental fue denigrar o ignorar cualquier evidencia científica de que la vida comienza con la concepción.

Frecuentemente me preguntan que es lo que me hizo cambiar. ¿Cómo pasé de ser un destacado abortista a un Abogado Pro Vida?

En 1973 llegué a ser Director de Obstetricia en un gran Hospital de la ciudad de Nueva York, y tuve que iniciar una unidad de investigación perinatal; era el comienzo de una nueva tecnología que ahora utilizamos diariamente para estudiar el Feto en el útero materno. Un típico argumento pro aborto es aducir la imposibilidad de definir cuando comienza el principio de la vida, afirmando que ello es un problema teológico o filosófico, no científico.

Pero la Fetología demuestra la evidencia de que la vida comienza en la Concepción y requiere toda la protección de que gozamos cualquiera de nosotros.

Ud. podría preguntar: ¿Entonces, por qué algunos Doctores, conocedores de la Fetología, se desacreditan practicando abortos?

Cuestión de aritmética: A 300 dólares cada uno, un millón quinientos cincuenta mil (1.550.000) abortos en los Estados Unidos, implican una industria que produce 500 millones de dólares anualmente. De los cuales, la mayor parte van a los bolsillos de los Doctores que practican el aborto.

Es un hecho claro que el Aborto voluntario es una premeditada destrucción de vidas humanas. Es un acto de mortífera violencia.

Debe de reconocerse que un embarazo no planificado plantea graves y difíciles problemas. Pero acudir para solucionarlos a un deliberado acto de destrucción supone podar la capacidad de recursos de los humanos; y subordinar el bien público a una respuesta utilitarista a un problema social.

Como científico, no es que simplemente lo crea, sino que yo sé y conozco que la vida humana comienza en la concepción. Y aunque no soy de ningún credo religioso determinado, creo con todo mi corazón que existe una divinidd que nos ordena finalizar para siempre este infinitamente triste y vergonzoso crimen contra la humanidad.
Dr. Bernad Nathanson.

***

El Dr. Nathanson fue bautizado en la Iglesia en 1996 y es hoy dia un ferviente católico y defensor de la vida. Ha escrito y producido videos pro-vida. Entre los mas famosos: El Alarido Silencioso (video) y La Mano de Dios (libro)